Recientemente leía sobre el fin de la civilización occidental, tal como la
conocemos.

Esta lectura comenzaba con la reflexión de la reciente publicación de las
caricaturas del profeta Mahoma en los periódicos europeos. Estos acontecimientos
ofrecen algunas interrogantes para cualquier observador del panorama mundial. La
globalización es un proceso que está mordiendo a quienes la han promovido.

Con el llamado a abrir sus economías, los centros de producción se han movido
del occidente a otras partes del planeta. Las reservas de petróleo se encuentran
en una zona llamada la "zona del billón de oro", mientras que la economía
occidental, con su énfasis en el consumo y el extra confort, ha venido
declinando poco a poco.  Tener hijos, en las zonas desarrolladas del mundo
occidental va contra esa nueva tendencia, mientras que Asia, Africa y América
Latina sufren con la superpoblación.

La globalización no es un fenómeno gratuito y natural. Es una tendencia que
los élites de los países más poderosos del planeta tierra han seguido para
obtener más ganancias. Han quitado la soberanía a muchos países, han
intervenido, incluso militarmente, en aquellos países en los que necesitaban
ejercer un control mucho más fuerte y rígido. A todo ello le han llamado
democracia.

Pero, según ese artículo, toda acción tiene su reacción.  Hamas es un
ejemplo. Esa organización fue elegida democráticamente, bajo los estándares de
la democracia occidental. Ya no tendrían excusas de seguir anatematizando a
dicha organización bajo el estándar que ellos mismos han colocado la democracia.

Con la globalización también se está dando el fenómeno de la inmigración
masiva. España es la puerta de entrada para muchos emigrantes africanos. Estados
Unidos quiere poner una muralla en toda su frontera con México. El paraíso que
ellos han promovido, el estándar que ellos han publicitado tanto, es lo buscan
miles de inmigrantes cada día. Como dice el dicho, han criado cuervos ... En
Estados Unidos la Mara Salvatrucha, cuyo origen se encuentra en los hijos de los
salvadoreños inmigrantes es un tema preocupante y que da miedo. En Francia, los
africanos protestaron con violencia, demandando respeto para ellos mismos. Son
hechos con los que no contaban estos países.

En fin, estamos delante de cambios en este mundo globalizado que se resiste a
uniformizarse y a que sea un solo gobierno quien dicte la forma de vivir de
millones y millones de seres humanos.